Subir tus ganancias como asesora de imagen:
salí del remo y adoptá el BRILLO®
A las asesoras de imagen, las ganancias de nuestro negocio nos importan y mucho. Para quien sospeche lo contrario, el recordatorio es que, para dedicarnos a este rubro, elegimos transformar nuestro don especial por lo estético en una profesión redituable.
Ahora bien, concretar en la cuenta bancaria el número que proyectamos y anhelamos lleva un aprendizaje consciente y que va a contramano de lo que por años y años nos inculcaron.
Quiero decir con esto que hace falta desarmar creencias que actúan como freno de mano y, al mismo tiempo, diseñar un plan que permita un crecimiento fluido y con menos esfuerzo.
O, como propongo en esta nota, pasar del formato REMO al modo BRILLO®.
El modelo remo
Como primera etapa, mi propuesta es poner el foco en premisas que, como objetivo de mínima, conviene revisar y, en el de máxima, desterrar de nuestra memoria.
Comparto para eso acá tres pensamientos muy típicos, que tal vez te resuenen.
“Para ganar más, hay que trabajar más”. ¿Quién no conoce esta máxima? ...Y ¿quién no la implementó o implementa al pie de la letra? La trampa que esconde: nos lleva a dejar nuestra agenda abarrotada, a relegar otros sueños, llegar extenuadas al final del día... Pero, de todas maneras, seguir corriendo atrás de la zanahoria monetaria.
“El trabajo siempre requiere esfuerzo”. Esta expresión le agrega un grado de dificultad a la anterior. Porque, además de sumar horas, estas tienen que ser “cuesta arriba”. Con este formato, la motivación y la creatividad quedan en el olvido.
“Ya está todo hecho”. Ufff, ¡tantas veces lo escucho en mis clases y mentorías! Sí, como asesoras de imagen, podemos afirmar que tiene su parte cierta. Pero también hay un sinfín de oportunidades a nuestro alcance. Una pista: prestar atención a los cambios en la moda y los nuevos códigos de vestimenta.
La vuelta al BRILLO®
Para la segunda etapa, mi recomendación es que cambies tu mirada y te pases al team BRILLO®. Para ello, te invito a que comiences a reflexionar las siguientes consignas.
Mi sugerencia es que leas la lista completa y luego te tomes un rato para pensar y escribir las respuestas o los pensamientos que te dispara cada punto. Te servirán como pilar para salir de la improvisación y armar una estrategia a tu medida.
¿Pensás tus honorarios de acuerdo a la solución que implica para tu clienta o cliente? La falsa creencia es que cobrar menos lleva a tener más clientas y clientes. Y esto puede alejarte del objetivo de un negocio sustentable. Si estás en busca de tus nichos de expansión, no dejes de lado las oportunidades relacionadas con tus ámbitos afines o más cercanos.
¿Tenés claro qué te sale “de taquito”? Esas facilidades pueden transformarse en dones rentables.
¿Para qué te contratarías? Parece una pregunta demasiado simple. Pero creéme que da buenos indicios.
Sincerate sobre tus horarios reales. Conocer el biorritmo propio es un punto a favor. También, tener claras tus posibilidades concretas para dedicarte a tu negocio de asesoramiento de imagen. Ojo, con los ladrones de tiempo.
Definí tu segmento y tu comunicación comenzará a conectar. Luego llegarán las clientas y clientes esperados. Un error muy típico es querer hablarle a “todos” y eso solo genera mensajes vacíos.
¿Tu menú de servicios ofrece distintas modalidades? Es cierto que las entrevistas individuales son una base fuerte de nuestro trabajo de asesoras de imagen. Pero si es tu única opción perderás la posibilidad de expandirte.
¿Querés armar un plan que te saque del modo “remo”? Regalate la sesión de auto mentoría y diagnóstico del Método BRILLO®, el entrenamiento online que te llevará a priorizar tus talentos, detectar tus oportunidades y generar más atracción hacia tu negocio.
El valor del curso es de USD 99 o ARS 19800 y lo podés hacer a tu ritmo. Hacé click para más info.